A muchos les pasa, una y otra vez caen en lo mismo, a veces
esperando que esta vez sea diferente, pero no, normalmente siempre es igual.
Desde el que dice que hoy si va a estudiar para pasar el parcial, hasta la
señora que al día siguiente dice cosas como, “mi marido es bueno, pero a veces
se desespera”, luego de recibir flores después de que en la noche otra vez
llegó borracho su esposo y tal vez le puso su zarandeada. Ambos tienen en común
que esperan que esta vez sí sea diferente.
No se trata de ser rencoroso, pero tampoco de ser tan fácil
para supuestamente perdonar, porque posiblemente ni se perdona y sí se guardan
las cosas para tenerlas ahí, como una reserva para cuando se ofrezca.
Hoy llegó muy risueño, conciliador, vacilador, amigable,
cariñoso, buena gente, amable, etc. Pero, ¿qué hay de todo lo que se viene
arrastrando y no hay interés por cambiarlo, posiblemente porque no se da cuenta
la persona, puede ser, pero no hace nada por mejorarlo?
Que una sonrisa o una broma o un detalle, no hagan olvidar
todas las informalidades, deudas, desaires, plantones, las faltas de educación,
todo el desinterés, todas las experiencias que no se tenía la necesidad de
vivir, todo lo que se vio en la necesidad de conocer sin tener por qué conocerlo,
lugares a los que se tuvo que asistir sin haber necesidad, las situaciones a
las que se vio expuesto sin ser responsable de ello.
Que una propuesta no borre tan fácil todo lo mal hecho
durante tanto tiempo, el que solamente cuando es de allá para acá se muestre
interés y ese mismo interés no existía cuando era al contrario.
Que no se olvide que no sólo se pedía, hasta se exigía
entrega total, “ponerse la camiseta”, cuando del otro lado no había la misma
entrega o la camiseta ni a hilacho llegaba.
Que no se olvide que no se recibía el lugar que se merecía,
pero eso sí, había que dar su lugar cuando era al contrario.
No es ser rencoroso, es simplemente cuestión de
reciprocidad, así funcionan las cosas, no se puede simplemente exigir, hay que
dar, para empezar, respeto, el mismo que se esperaría recibir.